"... Nací en Eritrea en 1979. Un día, cuando tenía 15 años de edad, mi abuela vino del pueblo. Ella tenía 55 años entonces. Mi abuela le preguntó a mi madre si mi clítoris había sido cortado, mi madre respondió que no.
Mi abuela dijo que si mi clítoris no era cortado yo sería mas sexual y no sería capaz de conformarme con un sólo hombre, aun si me casara, no estaría satisfecha con un hombre a menos que mi clítoris fuese cortado. Entonces mi madre estuvo de acuerdo. Cuando regresé a casa de la escuela 3 personas me sujetaron las piernas y mi abuela me cortó. Estuve llena de dolor por 3 meses. No podía orinar y no tengo sensación ahí desde ese día. No estoy lista para el sexo y otras cosas. Gracias por compartir mi historia. ..."
Seiemawit Tkabo.
fuente: the labia project , traducción: laselectroputas.blogspot.com
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